LA MESA DE LA COMUNIÓN CON DIOS

 

                   

 

Mateo 26: 20-

"Cuando llegó la noche, se sento a la mesa

con los doce."

Cuando llegue la noche en tu vida, ten preparada la mesa de la 

comunión, e invitalo a Jesús.

Porque él viene donde se le está esperando.

Él come con quién le ha preparado mesa, y Él se sienta junto al que quiere oírlo.

Hay momentos en que nuestro día se oscurece, aunque sabemos que no 
somos de la noche sino del día.

1 Tesalonicenses 5:5
porque todos vosotros sois hijos de la luz e hijos del día. No somos de la 
noche ni de las tinieblas. 
1 tesalonicenses 5:7-Porque los que duermen, de noche duermen, y 
los que se emborrachan, de noche se emborrachan. 8-Pero puesto que 
nosotros somos del día, seamos sobrios, habiéndonos puesto la coraza 
de la fe y del amor, y por yelmo la esperanza de la salvación. 9-Porque 
no nos ha destinado Dios para ira, sino para obtener salvación por medio
de nuestro Señor Jesucristo,…

Hay momentos en los cuales, dejamos de ver nuestra Luz, que es el Señor, como si
este nos hubiese abandonado.

Hay momentos en que aun conociendo toda la palabra de Dios sentimos una gran desorientación, y no sabemos qué hacer.
Pero aquí dice que, cuando llegó la noche en que iba a ser entregado, Él 
"hizo preparar la mesa para comer la pascua junto a los doce, aún 
sabiendo que en medio de ellos había uno que lo iba a entregar."

Por nada ni nadie  debemos dejar de tener 
comunión con Dios y más en nuestra noche oscura.

Se que es difícil, muy difícil hablar con Dios en esos momentos, Dios 
sabe que así es, pero si lo hacemos, Él estará ahí.

Aquella no era su noche, sino nuestra noche. Era la noche en que 
nuestros pecados serían juzgados sobre la cruz.

Y dice que en esa noche, él tuvo antes comunión con los que el Padre
y él habían elegido.
Si hoy estás en una noche oscura, Dios está dispuesto a sentarse contigo y tener comunión, y más aún si tú estás ahí.
Esperándolo, él vendrá y hablará contigo y te mostrará más de lo que 
esperabas ver.

Es en las noches de más oscuridad que brilla la más pequeña luz de Dios 
dentro de nosotros, y esa pequeña luz nos puede revelar la verdad más 
grande para nosotros en ese hora.

No tengas miedo a las noches de oscuridad, y espera en ellas a Jesús, nuestra luz.

Isaías 50: 7-¿Quién hay entre vosotros que tema al SEÑOR, que oiga la 
voz de su siervo, que ande en tinieblas y no tenga luz? Confíe en el 
nombre del SEÑOR y apóyese en su Dios.
No hay nadie que teniendo el Temor del Señor, deje de oír su voz y ande 
en tinieblas, porque él es Luz.

Dice que Él se sentó a la mesa que ellos le prepararon, si bien fue él 
quien eligió el lugar donde celebrar la pascua, si bien es Dios quien elige 
el lugar donde tendrá comunión contigo, eres tú y soy yo quienes 
debemos preparar la mesa.

Cuando tenemos un gran invitado, vamos por una buena mesa, ¡cuán 
importante es la mesa para Dios!

Hay mesa que el hombre hizo para la fortuna, mesa de juegos, de 
adivinación, de negocios, de trampas.

Isaías 65:11
11-Pero vosotros que abandonáis al SEÑOR, que olvidáis mi santo monte,
que ponéis mesa para la Fortuna, y que preparáis vino mezclado para el 
Destino, 12-yo os destinaré a la espada, y todos vosotros os encorvaréis 
para la matanza. Porque llamé, mas no respondisteis, hablé, mas no 
oísteis; hicisteis lo malo ante mis ojos y escogisteis aquello que no me 
complacía.…

Hay mesas, donde el hombre cree tener comunión con Dios, pero tiene 

comunión con las tinieblas, son  mesas a los demonios

1 Corintios 10: 20-No, sino que digo que lo que los gentiles sacrifican, 
lo sacrifican a los demonios y no a Dios; no quiero que seáis partícipes 
con los demonios. 21- No podéis beber la copa del Señor y la copa de los 
demonios; no podéis participar de la mesa del Señor y de la mesa de los 
demonios. 

Hay una mesa que Dios anhela y es la Mesa de la comunión de sus 

íntimos con él.

Apocalipsis 3:20 «Mira que estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi 
voz y me abre la puerta, entraré en su casa y cenaré con él y él 
conmigo» 

Dios quiere que tengas siempre la mesa preparada para él, sea que estés

en tu noche más oscura, sea que tengas luz.

La mesa de la comunión sólo la preparan los que se apoyan en él, sólo 
los que esperan en él, sólo los que no lo traicionan, ni lo entregan.

¡Así que hoy adornaremos la mesa, y comeremos con gozo!

Dice que él una vez que ellos las hubieron preparado vino y se sentó.
Y luego les habló y les reveló que uno de ellos le iba a entregar.
Dios tiene cosas que quiere charlar contigo, quiere contarte, quiere 
compartirte.
Dios siempre está escuchándote a ti, pero prepara la mesa para oírlo a 
él. Y te asombraras de las cosas que tiene para decirte.

Jeremías 33.3 Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas 
grandes y ocultas que tú no conoces.

Es en tu noche oscura, si tu buscas su luz, le espera con la mesa 
preparada, en la cual Dios te revelará, te enseñará cosas grandes y ocultas 
que aún no conoces, ¿y sabés que? 

Olvidaras tu oscuridad y verás la Luz.

¡Aleluya!

Pastora Sara Olguín

¡Bendiciones!