SIGUIENDO LA NUBE DE DIOS

 1 Crónicas 15:1-2

1-Hizo David también casas para sí en la ciudad de David, y arregló un lugar para el arca de Dios, y le levantó una tienda. 2 -Entonces dijo David: El arca de Dios no debe ser llevada sino por los levitas; porque a ellos ha elegido Jehová para que lleven el arca de Jehová, y le sirvan perpetuamente

David aprendió del grave error anterior ( según 1 Crónicas 13:1- 14), el cual Dios le perdonó por su arrepentimiento e ignorancia. Por ello David esperó el tiempo en el que fue restaurado su corazón (cerca de tres meses, tiempo en que el Arca estuvo en la casa de Obed Edom) 

En ese tiempo, aprendió muy bien sobre la instrucción de Dios acerca de lo que fue su ignorancia, y también  que aunque él fuera rey, estaban los sacerdotes y levitas para ministrar a Dios ( Números 4:4 y15-Este será el servicio de los descendientes de Coat en la tienda de reunión, con relación a las cosas más sagradas:…) 

La intención de David estaba alimentada o sostenida por el amor a Dios y a su Presencia; él era capaz de entregar su vida, como lo hacía en cada batalla, poniendo al Señor antes que a todo sus anhelos o deseos personales, como aquellos  de su familia. 

Pero una buena intención nos puede llevar a desviarnos de la voluntad de Dios o de lo que Dios instruye. 

• Cuando quieres hacer algo para Dios debes estar seguro, de que Dios, te lo permite. Pero más aún cuando Dios te dice que hagas algo para él. 

Es  muy importante que lo sepas a través de la oración y  sus respuestas, de que es su voluntad y que lo que estás haciendo, lo haces según su instrucción, de lo contrario aunque sea algo nacido de un corazón sincero, y que ama a Dios puede tener consecuencias, ya sean leves o graves, para uno mismo, y a veces malas para otros. 

Como si fuera un llamado de Dios pero no se siguen sus instrucciones. 

Aquí vemos que este buen deseo del rey David, trajo la muerte de Uza, por el desconocimiento de la instrucción de Dios acerca de cómo llevar la Presencia de Dios (el Arca) de cómo trasladar su Presencia. 

A Dios no le había desagradado el sentir de David, sino que no lo consultó con él y por ende no fue guiado ni instruido por Dios en cómo hacerlo. David estaba tan ansioso por esto tan esperado, que ni siquiera consultó con los sacerdotes de Dios.

Dios es omnisciente, está en todo lugar, pero él así mismo se manifiesta cuando quiere. 

Así que, por ejemplo, cuando Dios nos llama a hacer algo para él, nos da sus instrucciones, a fin de que ni agregando ni quitando nada, su Gloria, su poder, y su bien se manifiesten, es decir, aquello que él quería mostrar a través de esa obra.

Moisés fue llamado a levantar un tabernáculo, un lugar donde Dios se quería manifestar, y que cada quién que quisiera hablar con él, lo encontrará.

 Éxodo 25:8 

Y que hagan un santuario para mí, para que yo habite entre ellos

Éxodo 25:9 

Conforme a todo lo que te voy a mostrar, conforme al diseño del tabernáculo y al diseño de todo su mobiliario, así lo haréis.

 Éxodo 25:40 

Y mira que los hagas según el diseño que te ha sido mostrado en el monte. 

Éxodo 39:32-

Así fue acabada toda la obra del tabernáculo de la tienda de reunión. Los hijos de Israel hicieron conforme a todo lo que el SEÑOR había mandado a Moisés; así lo hicieron. 

Éxodo 40: 33-34- 38-

 Entonces la nube cubrió la tienda de reunión y la gloria del SEÑOR llenó el tabernáculo 

• La Nube era la evidencia de que la gloria de Dios estaba ahí, y que su Presencia estaba con ellos, ¡Aleluya! 

• Cuando Dios llama, y se obedece, y se siguen sus instrucciones, Él traerá siempre aquello que se propuso, y habrá evidencia de que ésa era su Voluntad, que él está en ello y con quienes él llamó. 

Así que David, cuando entiende esto, no solo se arrepiente, sino que busca las instrucciones, y no solo eso, sino que convoca, a quienes fueron llamados por Dios para ello, y estaban dispersos, o estaban sin funcionar en sus llamados.

1 Crónicas 15: 12 y 13  (Vamos a leerlo)

1 Crónicas 15: 25-26 

Desde la Casa de Obed-Edom, al nuevo lugar en la Ciudad de David, que éste le había preparado. 

Pero lo más maravilloso es que, Él mismo, Ha-Elohim ayudaba a los que llevaban el arca del pacto de Dios. 

Es decir: Dios nos ayudará, te ayudará a traer su Presencia a este lugar, que Dios ha querido que le preparemos.

Dios será tu fuerza, para que aún con sacrificio, con sufrimiento, pero con alegría en tu corazón, subas al lugar de Encuentro con él, donde Dios quiere alegrarse en nosotros y que nosotros nos alegremos con él. 

Es en medio de esa verdadera alegría, que serás saciado, saciada, y llevarás vida entre los que están muertos. 

Y podrás traer a los que también quieran alegrarse en tu Dios. 

La obediencia, la fe y la alegría en el servicio al Señor recompensa al que lo busca sinceramente. 

Mientras que la negligencia, el olvido de Dios, la amargura, secarán las vidas de los que solo se atreven a mirar desde las ventanas de sus casas en vez de venir a cada celebración con él, como lo hizo Mical.

1 Crónica 15:29 

Y sucedió que cuando el arca del pacto del SEÑOR entró en la ciudad de David, Mical, hija de Saúl, miró por la ventana, y vio al rey David saltando y regocijándose; y lo despreció en su corazón. 

No seamos ignorantes, ni creamos que la voluntad de Dios la podemos reemplazar con lo que nosotros llamamos buena intención, no nos quedemos en el otro lado (casa de Obed-Edom) cuando Dios se levantó en su Gloria hacia otro lugar, y no escojamos mirar desde nuestra propia ventana, como Mical, sino que entremos por la Nueva Puerta que él nos abrió.

Dios a través de esta palabra te anima a levantarte y seguir la Nube de su Gloria, la cual decidió mostrar en este nuevo Kairos, para lo cual debes seguirlo.

Pudiéramos haber estado siguiendo lo que no era la Nube de su Presencia, o haber estado haciéndolo a nuestra manera. De ambas formas, las consecuencias nos traerán dolor, desilusiones, pérdidas y retrasos.

Este es el momento de Dios para encontrarte en este lugar con Él y alinearte a sus tiempos, a su paso, y seguirlo, como él nos instruye en su Palabra.

Dios te bendiga

Pra Sara Olguín.