ENTRADA DESTACADA

PORQUE HAS OÍDO MI VOZ

Imagen
Si somos capaces de darle todo a Dios,     Él nos dará mucho más de lo suyo. Él nos dio mucho más de lo que nosotros somos  capaces de darle, Él nos dio a su Hijo y en su Hijo, nos ha dado todo. Romanos  8:32 " El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?" Si somos capaces de obedecer tan solo al oír su voz, la recompensa de Dios nos sorprenderá. Hebreos 11:6  Nosotros oímos pero necesitamos señales, porque tememos equivocarnos. Abraham, solo oyó una voz y obedeció, no una vez sino tantas, cada paso de Abraham respondió a oír y obedecer la Voz de Dios. En Génesis 22:12 dice: Ahora sé, que tienes temor de Dios, porque no te negaste a darme a tu único hijo. Cuanto más oímos y obedecemos algo extraordinario acontece dentro de nuestro nuevo ser, va llenandose del temor de Dios no solo de Fe para creer, sino de Fe para obedecer, a causa del Temor de Dios que también va crecien...

TOCADOS POR LAS MANOS DE DIOS

Jeremías 18:4 " Y la vasija de barro que él hacia se echó a perder en su mano;  y volvió y la hizo otra vasija, según le pareció mejor hacerla.
6b- ...He aquí que como el barro en la mano del alfarero, así sois vosotros en mi mano, oh casa de Israel."

En el versículo 4, nos cuenta Jeremías lo que vio en casa del alfarero.
 Cómo bajo esas manos, le estaba dando una forma especial y única, y cómo aquella vasija se echó a perder.


 Es decir mientras Él la tornaba, su consistencia no alcanzó a retener esa forma modelada.
Pero dice que fue en "sus manos" o sea no ocurrió en el horno, o en el tiempo de secado sino cuando el artesano la moldeaba. 
Esto habló a mi espíritu, tal vez como esa imagen habló a Jeremías, el profeta de Dios.
El artesano mientras esta dando la forma de la vasija de arcilla, la tiene en movimiento, con agua y entre sus manos.

El movimiento es como la rueda de la vida, con sus aflicciones; aquellas que nos dijo Jesús que tendríamos, pero las cuales él había ya vencido, por y para nosotros. (San Juan 16:33)

 El agua es la continúa presencia de su Espíritu en la palabra.


 Las manos del Señor que nos moldean para mí es su Palabra en mi espíritu.

 Ella entra como agua de vida allí y luego penetra a mi alma, en la cual tiene que modelar una forma nueva en que seré transformada.
En ese proceso mucho de nosotros nos deterioramos, no lo resistimos, pero Dios por eso no nos aparta, ni nos deshecha.
 Tal vez muchos nos ven en una prueba que no aprobamos, y es como si se repitiera en nuestras vidas, y ellos piensan:-Esta no va más, siempre hace lo mismo! -¡Pero este hermano siempre con lo mismo, no aprende!.
 ¡Qué bueno que el Alfarero no es así!  
Si no estuviéramos en sus manos, sería otra cosa, no lo sé, pero aquí la palabra nos enseña, que en las pruebas de transformación, en los procesos de moldeado tú y yo, estamos en sus manos, y aunque seamos debiluchos y no  resistamos tanto movimiento, tanta agua y tanto tacto, él, nuestro Dios nos rehace ¡Huy! ¡Qué hermoso!
 "No nos castiga, no nos deshecha, no nos insulta, no nos descarta: Nos rehace."
 Sí, es cierto que es mucho mejor aguantar ese amasado de sus manos en nuestras almas, es mucho mejor cuando salimos rápido al horno y luego al secado, para que los demás  vean nuestra nueva forma y sean bendecidos, pero también es bueno tener este Aliento de Dios, que si te quebrarás en sus manos Él no te sacará de las mismas tirándote al basurero.
 ¡No! Él no te reemplaza con otra, sino que se ha empeñado  en sacar de ti un vaso con su forma, a su gusto, para su Gloria, y así será, ¡aleluya!
Cuando Él nos pensó; en Isaías 43:1así dice Jehová, Creador tuyo, oh Jacob, y Formador tuyo, oh Israel: No temas, porque yo te redimí; te puse nombre, mío eres tú" nos puso un nombre dice la Palabra, Él nos llamó:¡Mío eres tú! bajo ese nombre esta su proyecto, o sea tu propósito en Él, mi propósito en Él,  dice este versículo con la veracidad de su boca, Creador tuyo, Formador tuyo, Él es quién quiere formarte, moldearte y modelarte; y aunque muchas veces nos deshagamos entre sus manos según su palabra con el mismo barro nos rehará.
Él no nos perderá, fue a un alto precio nuestro rescate cuando estábamos extraviados.
 El cumplirá su propósito en cada uno de nosotros, pues su mayor gozo es vernos entrar al cielo: terminados, acabados, completos, satisfechos, hechos por Él: (Made in Dios).
No te desanimes, no creas que has sido descartado. Si aún te quedas entre sus manos, no temas al movimiento de la vida, y su agua no te dejará endurecer.  Sino pídele  que siga, que siga y te moldee según su gran Sabiduría.

Dios te bendiga 
Pastora Sara Olguín.

Comentarios

LO MÁS LEÍDO

ES TIEMPO DE FLORECER: ¡FLORECERÁS!

EL TORRENTE DE BESOR

SEÑAL DEL ULTIMO TIEMPO: LA COMEZON DE OIR

EL AROMA DE DIOS

LOS QUE NOS VISITARON