EnTRADA DESTACADA
LA TÚNICA Y LOS COLORES QUE FALTABAN
- Obtener enlace
- X
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones
Génesis 37:3 3
“Y amaba Israel a José más que a todos sus hijos, porque era para él el hijo de su vejez; y le hizo una túnica de muchos colores”
Nosotros somos hacedores de la Palabra porque amamos a Dios y queremos obedecerla! La Palabra dice que no seamos “oidores olvidadizos” sino “oidores hacedores” de lo que oímos ( Santiago 1:27 “Mas el que hubiere mirado atentamente en la perfecta ley, que es la de la libertad, y perseverado en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, este tal será bienaventurado en su hecho.”)
Así que siempre que queremos, hacemos la Voluntad de Dios.
Pero es bueno admitir que muchas de esas veces lo hacemos con desgano, con cansancio o apatía, y hasta falta de fe.
Es bueno admitirlo porque nos damos oportunidad de ser perdonados, comprendidos por Dios, corregidos y se nos vuelven a dar nuevas oportunidades para ello!
Es bueno admitirlo por nosotros mismos porque de hecho que no queremos andar fingiendo lo que no somos, es decir podemos hacer una buena obra en Dios, pero no hacerlo por la Palabra o para él con ánimo presto, y el admitir, nos da también oportunidad a nosotros de no dejar que esto se haga una mala costumbre en nuestro corazón. Lo que leía sobre José en Egipto me trajo a esta meditación.
Pues José camino mucho tiempo en un Camino de un tremendo proceso,
¿Fue correcto lo que hizo José en todo su andar?
Sí, siempre hizo lo correcto, pero lo que hacía ¿lo hacía con entusiasmo, con fe, con esperanza?
José había muerto en ese proceso y quién vivía ahora, no era José.
Ni él se reconocía.
¿Cuándo termina el proceso en el cual estás?
Cuando no te reconozcas.
Ni el se reconocía ni ¡los hermanos de José lo reconocieron!
La vida de José podía dividirse en: La vida en su tierra, y la vida en su cautividad: Egipto.
Aún otros estudiosos lo llegan a dividir en tres etapas, no estoy en desacuerdo con ello, pero en aquella primer etapa: en su tierra, allí era libre, era él, tenía todo.
Aquí era esclavo, no podía ser él, le faltaba todo.
Pero Dios estaba con José.
Dios está contigo, cuando tienes todo y cuando no tienes nada.
Pero ¡nosotros no estamos con Dios siempre!
Podemos tenerlo todo y no estar con Dios, podemos no tener nada y no estar con Dios.
¡En el proceso se trata de tenerlo todo o no tenerlo nada, pero estar con Dios!
Cuando José se hizo uno con Dios, el proceso llegó a su fin.
De repente.
Sí, de repente el escenario de su vida cambio.
Aquel hombre, el Copero del Rey, que había sido tocado por la unción de interpretar sueños de José, se acuerda de él, ante Faraón y éste lo hace llamar (Génesis 41)
Del llamado pasa a ser escogido para ser el Segundo del Faraón y allí el proceso termina, cuando comienza el para qué en Dios. Es decir: El gobierno de José. (Génesis 41:41-45)
Aquello para lo cual había nacido, para lo que lo había soñado Dios, y le reveló a su padre Israel.
En la Administración de José, la túnica de José comienza a manifestarse, aunque no se veía, aunque se la arrancaron sus hermanos, aunque quedó manchada por sangre de animales (Génesis 37:32) siempre estuvo sobre él, en todo ese proceso, en todo ese viaje, fueron los colores de esa túnica los que pintaron su proceso: un espectro de colores, algunos que no pueden percibir se por el ojo humano, y otros visibles.
Dicen que los colores que vemos en el arco iris son los que según la propagación de la luz, explicado a manera muy simple, podemos ver.
Un ojo adaptado a la luz generalmente tiene como máxima sensibilidad un valor de 555 nm, en la región verde del espectro visible.
El espectro, sin embargo, no contiene todos los colores que los ojos humanos y el cerebro puedan distinguir; marrón, rosado, magenta, dorado, plateado y negro están ausentes por ejemplo, porque necesitan la mezcla de múltiples longitudes de onda.
Los ojos de muchas especies perciben longitudes de onda diferentes de las del espectro visible del ojo humano. Por ejemplo, muchos insectos, tales como las abejas pueden ver la luz ultravioleta que es útil para encontrar el néctar en las flores.
¿Qué te quiero decir con esta simple explicación?
Que esa túnica no tenía todos los colores que pintaron el proceso de José, pues hubieron hechos de mucho sufrimientos, de colores oscuros.
“Esos colores aunque no estaban, eran parte de ese manto de Gobierno para llegar a Administrar el Pan en medio de la mayor época de hambre en toda aquella tierra conocida.”
Muchos no ven todo tu sufrimiento, no ven todo el fogueo por el que pasas, ni todas las aguas que te han inundado, pero Dios sí, porque él lo planeó.
No las consecuencias de tus pecados, no, sino aquello que te está moldeando para ser en Él, quien debes ser.
Faraón llamó a José : Zafnat-panea en Génesis 41:45a que según algunos diccionarios bíblicos significa: El viviente ( o Éste) es el aprovisionamiento del país, o 'preservador del mundo', 'mantenedor de vida' o 'el que revela secretos'
Aquel pequeño joven terminó siendo un hombre lleno de pan, para alimentar a millones, con su sabiduría, con su prudencia, con su inteligencia en la administración y provisión del sustento.
Y Todo eso lo soñó Dios con José, el hijo de Israel, todo esto estaba impreso en los colores de su túnica, con la cual su padre lo vistió en medio de sus hermanos, pero antes de ser lo que Dios lo llamó a ser, tuvo que morir a lo suyo propio, despegarse de quien era él.
La vida de José tiene que llevarte a ver a Jesús.
Nos tiene que llevar a vernos a nosotros en Él y tiene que llevar a ver a Jesús en tu vida por los otros.
José tuvo una túnica dada por su Padre la cual le fue arrancada por sus hermanos, Jesús fue vestido de una túnica sacerdotal (Levítico 39:22) aquellas que no tenían costuras, la cual fue arrancada por los soldados y jugada entre ellos, a los pies de la cruz. (San Juan 19: 23-24)
José fue llamado por el mismo Faraón, El viviente aprovisionamiento, el Aprovisionamiento que camina entre nosotros, así como Jesús es el Pan del cielo, el pan que se multiplicó en el desierto de los que tenían hambre y sed de justicia y como lo es para nosotros hoy.
San Juan 6: 50-51 Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre, y el pan que yo les voy a dar es mi carne para que el mundo tenga vida.
Y así como José fue alejado de su padre, y odiado por sus hermanos, despojado de su túnica, olvidado por sus hermanos, así también padeció nuestro Hermano Mayor, el Señor Jesús, separado del Padre por nosotros, crucificado por nosotros, a fin de ir y prepararnos un camino delante nuestro que estaba cerrado, que no existía, como José les preparó un camino y un lugar a todo su pueblo.
Hoy tenemos a nuestro José, a nuestro Zafna Panea, a nuestra Provisión viviente, aquel que te da el verdadero pan, el cual quita el hambre y da vida para siempre.
Tenemos a nuestro Salvador que nos abrió el camino para que siempre, aquí y ahora pasemos y busquemos paz, perdón, sosiego, descanso en él, tenemos a un Hermano Mayor que nos conoce a cada uno, y nos recuerda que lo que él sabe que hicimos está perdonado si lo confesamos, y nos arrepentimos, y dejamos ya lo malo para venir a donde él está.
Así como José trajo a todos sus hermanos con él, después que lo reconocieron y confesaron el mal que hicieron.
Hay una túnica puesta sobre ti, hay un manto por el cual y para el cual estás siendo procesado/a, hay muchos colores en esa túnica, que no percibes, que no ves, pero es necesario, a fin de que llegues al final y seas quien debes ser.
Tu eres en Cristo, la Vida de Dios entre los tuyos, Tu eres en Cristo, el alimento de Dios entre los tuyos, tu eres en Cristo, el administrador de Dios entre los tuyos, administrador de la bondad, de la abundancia, de la misericordia, de la gracia, del perdón de Dios entre los tuyos! ¡Aleluya!
Hoy recordamos ante Jesús su hermosa obra, nosotros los que lo hemos aborrecido, ignorado y tenido como desechado de Dios, somos los que hoy lo reconocemos, lo confesamos, nos arrepentimos y le pedimos Danos Pan Señor, porque solo tu Pan nos mantiene Vivos, para dar Vida entre los muertos .
Dios te bendiga
Pra Sara Olguín.
- Obtener enlace
- X
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones
Comentarios
Que alegría recibir esta Palabra de Dios para mí alma
ResponderEliminarReconozco que muchas veces es hecho las cosas sin fé,sin gozó,sin su fuerzas y le pido perdón a mi Señor jesús.
Doy gracias a Dios por su proceso y me da ánimo esta Palabra sabiendo que Dios no esta procesando para ser en El uno para reinar y ser pan y ser administrador de Dios entre los mío.
Dios te bendiga Pastora Sara ♥️🌷
Gracias querida Lorena por tu comentario, sigue adelante es mejor dar de comer que mendigar el pan a los hombres, y quien come del Señor tiene en abundancia para compartir con otros!!! Gracias por compartir este Blog Casa de Pan con los tuyos!
EliminarGracias Pastora Sara por escribir y compartir está palabra. Has sido el alimento de Dios entre nosotros, gracias por alimentarnos y enseñarnos con Palabra de Dios. Muchas veces comí de aquí y Dios me habló, gracias. Oro a Dios, que, no nos veamos en otros espejos, que dejemos de ver lo que fuimos y solamente nos veamos en Jesús, y que otros puedan ver a Jesús en nuestra vida, no a medias, sino realmente a él, en el Nombre de Jesús, amén.
ResponderEliminarAmén ¡!! Gracias por tu grato comentario, no dejes de comer su Pan Jamás, pues ya lo sabes es vida a nuestros espíritus. Bendiciones!
Eliminar