ENTRADA DESTACADA

PORQUE HAS OÍDO MI VOZ

Imagen
Si somos capaces de darle todo a Dios,     Él nos dará mucho más de lo suyo. Él nos dio mucho más de lo que nosotros somos  capaces de darle, Él nos dio a su Hijo y en su Hijo, nos ha dado todo. Romanos  8:32 " El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?" Si somos capaces de obedecer tan solo al oír su voz, la recompensa de Dios nos sorprenderá. Hebreos 11:6  Nosotros oímos pero necesitamos señales, porque tememos equivocarnos. Abraham, solo oyó una voz y obedeció, no una vez sino tantas, cada paso de Abraham respondió a oír y obedecer la Voz de Dios. En Génesis 22:12 dice: Ahora sé, que tienes temor de Dios, porque no te negaste a darme a tu único hijo. Cuanto más oímos y obedecemos algo extraordinario acontece dentro de nuestro nuevo ser, va llenandose del temor de Dios no solo de Fe para creer, sino de Fe para obedecer, a causa del Temor de Dios que también va crecien...

EL DOLOR DE LA SEPARACION

"La tristeza se convertirá en gozo".
No hay otra cosa mayor, que nos dé tanta tristeza como el dejar de ver para siempre el rostro de un ser querido.

 Jesús comparó este gran dolor, con el dolor del alumbramiento, ¡del dar a luz!
Si lo analizamos decimos ¿en qué? 
 Si uno es físico, y el otro del alma.
Es que los dos son físicos, pues  se producen en lo natural, pero también los dos son emocionales, porque producen un sentimiento, en el alma.
Jesús también compara, el gozo del alumbramiento, que hace olvidar el dolor del principio del mismo, con el gozo de volver a reencontrarse con ese ser amado, que hace olvidar la gran tristeza de la separación.
¿Por qué Jesús los halla tan iguales? 


  • Porque son generadas por "la separación".
Una, para entregar a la vida un nuevo ser y la otra, para dejar que  ese ser querido, parta de la misma.
Las dos tienen otra cosa en común, aparte del dolor y la tristeza, y es:
 el "Gozo del reencuentro"
El reencuentro que se producirá:
Uno aquí, inmediatamente al alumbramiento, el otro, allá cuando nos volvamos a ver, por la resurrección de todos los que viven en Cristo Jesús.
San Juan 16: 20 al 22.
La esperanza del reencontrarnos es lo que nos mantiene en paz y nos hace superar todo dolor y dar consolación a otros.
Cristo es la Esperanza de Gloria del Justo, porque sabemos que no moriremos sino tan solo dormiremos y luego nos reencontraremos con él,
así como la madre sabe que ese amado hijo sale de su vientre no para perderlo sino para reencontrarlo entre sus brazos.
Que nunca nos falte ese gozo tan divino!
Dios te bendiga!
 Pastora Sara Olguín 

Comentarios

LO MÁS LEÍDO

ES TIEMPO DE FLORECER: ¡FLORECERÁS!

EL TORRENTE DE BESOR

SEÑAL DEL ULTIMO TIEMPO: LA COMEZON DE OIR

EL AROMA DE DIOS

LOS QUE NOS VISITARON